martes, 5 de mayo de 2015

Dale un lavado de cara y lo notarás



A veces es necesario un nuevo impulso para poder obtener la velocidad que teníamos antes. Y la farmacia, como negocio de éxito que es, engulle cada día muchas horas y trabajo que no permite ver más alla de las recetas, pedidos y el día siguiente.

Para ello, es necesario pararse un segundo, tomar aire y pensar en posibles acciones que nos ayuden a conseguir los objetivos definidos previamente. Como negocio con alto trafico de clientes, es necesario tener una buena imagen (corporativa si es posible) para poder suscitar el interés del cliente y hacer de su estancia lo más agradable posible, y su vuelta sea mucho más probable, no solo por el trato sino por la buena experiencia que haya tenido.


Una reforma, no tiene porque ser extrema como para cerrar la farmacia, sino llamémosle “lavado de cara”. Una pequeña reforma, un pequeño cambio en la farmacia que haga cambiarnos de situación (ligeramente) nuestra zona de confort y despertar esa motivación, muchas veces aletargada por la rutina y la gran cantidad de trabajo existente. Hemos de tener en cuenta el tipo de farmacia que tenemos y que nos gustaría tener, y cómo este cambio nos puede ayudar para conseguir esa “farmacia ideal”. Considero que siempre hemos de estar receptivos ante cualquier pequeña reforma para poder situarnos ante las numerosas actualizaciones en nuestro entorno y sociedad.

¿Qué conseguiremos con éste cambio?
  • Aumento de tráfico de clientes
  • Mayor impacto de productos y/o marcas hacia nuestro target
  • Mayor motivación en nuestro equipo
  • Inversion en la parafarmacia y planificación de objetivos para esta categoría

He considerado muy interesantes los siguientes links, en relación a lo hablado: